________________________Eso que siempre quise decirle

De: Priss

Capitulo VI: El amor no siempre es eterno.
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Escuchando música en la recamara, Koani aparentaba repasar los apuntes de la escuela, pero en realidad pensaba en cosas totalmente distintas.
Ya eran dos días desde que su vida había vuelto a la normalidad, y sin embargo tenía la sensación de extrañar algo.
Ella y Ryu por fin dejaron de verse y la paz había vuelto para ella.

El teléfono sonó de prono, exigiendo que alguien respondiera, y siendo ella la única en casa, pues....

~ Koani..

Dijo la misma, esperando saber quien llamaba.
Su rostro se tornó sorprendido poco antes de sonrojarse ligeramente. Comenzó a afirmar lo que la persona al otro lado de la línea decía, sonriendo de vez en cuando mientras escuchaba con atención.

~ Ah, si, Naomi... voy para allá.

Poco después colgó la bocina. Escogió una chaqueta cualquiera, ya dispuesta a salir y encontrarse con la otra mujer.
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~ Ja, ja, ja... Oye, oye. Y recuerdas aquella vez que caíste justo en frente del salón de clases?.

~ Oh, si, vaya que lo recuerdo. ¿Cómo olvidarlo?, en especial porque ni tu, ni Naomi se habían percatado de ello y eso que estaban justo allí.

Motto sonrió con verdaderas ganas de hacerlo. Naomi la había llamado para invitarla a tomar algo en aquel café al que solían ir cuando aun no eran pareja, es decir, cuando su amistad estaba en todo su esplendor.

Al saber que otra chica muy querida para ella estaría ahí, aceptó de inmediato. Así era.... Megu había vuelto. Dos años, maldición, dos años sin verla y ahora así como así las contactaba; sentía que le iluminaba la existencia..

Todo era como en aquel entonces, ellas tres juntas de nuevo. Recordar era algo agradable cuando lo hacían juntas.

Y tanto tiempo separadas también dio lugar a las confesiones de los últimos años.
Megu comenzó informando a sus amigas que ya era madre. Hacia siete meses que había dado a luz y era muy grato, aunque también extraño.

~ Y el bebé??.
Preguntó Naomi sin entender porque no lo traía con sigo.

~ Ah, con su padre. Quería que esto fuera especial y solo entre nosotras.... después lo conocerán.

Las chicas se miraron un momento y luego dirigieron esa mirada a la nueva madre. ¿Estaba bien así?, es decir, ya no podía comportarse como una soltera, debía ser más responsable. Después de todo, de las tres, Megu era la mayor, aunque gran parte de las veces era algo que no aparentaba.

~ Es un capricho que quería cumplir después de dos años.

Motto sonrió de nuevo, esta mujer tenia la facilidad para lograr que hiciera eso; no había cambiado en nada... pero ellas....


~ Y que hay de ustedes dos?, ¿ya dieron el siguiente paso o aun siguen estancadas?.

~ Koani... le hablaste de nosotras?..

~ Claro que no, no soy tan indiscreta.


De un momento a otro, una inútil discusión se presentó entre aquellas amigas. Pero en cuestión de minutos, Megu puso fin a la penosa situación, aclarando que ella sabia perfectamente los sentimientos de sus amigas sin que ellas lo demostrasen o dijeses. Eso era resultado del lazo que las unía.

~ Vaya, vaya... dejémoslo así.
~ Qué?, no me dirán que pasó entre ustedes durante este tiempo?.

Koani no lo medito más de una vez, le detalló completamente el como, cuando, porque y el fin de su relación con Naomi, y es que sólo Megu podía entenderlas sin juzgarlas.

~ Ya veo... pero su amistad no sufrió daños, verdad?.

Naomi observó a Motto por un instante, la tomó de la mano mientras le sonreía y daba respuesta afirmativa a la cuestión de su otra amiga.
No se afectó; mejoró debido a aquel cariño que habían experimentado.

~ Y no hay algún nuevo amor??.

Naomi miro de nuevo a su amiga cuando esta ultima realizaba otra pregunta. La curiosidad de la mujer no había disminuido.
Entonces habló, más confesarle que estaba saliendo con un joven dejó de ser buena idea cuando el rostro de Koani se tornó serio. Después de aquel comentario el resto de la reunión fue bastante incomodo.

Con Megu más que obligada a no preguntar más, Naomi con la culpa del estado de animo de la menor y con esta ultima tratando de asimilar las palabras de su expareja, ese reencuentro terminó mucho antes de lo que debía.
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Un par de minutos después de anochecer, Koani regresó a casa caminando; le hacia falta hacerlo. Quizá si permitía que el ligero aire le tocase el cuerpo y se cansaba un poco, podría asimilar la realidad... aunque aun parecía inútil.

Suspirando profundamente, alzó la mirada hacia su casa, encontrándose con algo inusual... o más bien alguien.

~ ¿Qué haces aquí?.
~ Quería.... pelear un rato.

Koani sonrió agradada. Se acercó al joven que la había esperado por casi una hora, para después sentarse sobre el columpio que se situaba a lado de la entrada principal de su casa.
Él muchacho se sentó junto a ella , comenzando a mecerse suavemente.

~ Y... donde estabas?. =Preguntó el chico.=
~ Ryu... ¿crees que es posible amar a alguien y después...ya no?; así nada más.

La chica ni siquiera puso atención a la pregunta de su compañero, sólo quería preguntarle algo, una duda, quería que alguien le dijese que le estaba pasando.
Sasaki suavizo su profunda mirada; él no era precisamente un experto en temas del corazón, pero por ella....


~ El amor no siempre es eterno, Koani.... No importa cuan lindo o doloroso sea, algunas veces no esta destinado a durar demasiado.

~ Vaya, eres todo un filosofo, quien lo hubiera dicho?....Ahhh, quizás es eso lo que nos pasó, a ella... y a mi también.


Sasaki había respondido sin dejar de mirarla, lo hizo de forma inmediata, sincera, sin meditar tanto las cosas... eso era lo que sentía. En cambió Motto, habló sin siquiera darse cuenta. Cuando se percató de sus palabras, se sonrojó y guardó silencio... se había delatado. Era verdad, Naomi ya no la quería... de esa manera, pero ella tampoco. No estaba triste por la relación de su amiga, lo estaba porque pensó y llegó a prometer que jamás la dejaría de amar... y ahora, sencillamente ya no la quería así.


La chica quiso librarse de la penosa situación, cambió drásticamente la conversación al preguntarle a su compañero que había hecho en ese par de días.
Sin querer, comenzaron una platica que se extendió por un buen rato, nada importante, sólo pequeñeces, pequeñeces que lograron que Koani olvidara sus inquietudes...por el resto de la noche.




Continuará....
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Este capitulo, no muy relevante, es el que da comienzo a la relación de estos dos personajes.
Qué puedo hacer?, me gusta darle vueltas al asunto.

Por otro lado, yo en verdad creo que el amor, así como otras clases de cariño, se pierden cuando no se “alimentan” con detalles... no crece.


priss_pk@hotmail.com