_______________________________Lazos


De: . Priss .

Capítulo XI.
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Rukia reía jovial y divertida, Ichigo la había hecho reír y luego de la feliz expresión, el pelinaranja le robó un beso. . . y otro, y uno más.

Para cuando repararon en ello, los jóvenes estaban en medio de la cocina, besándose con profunda pasión.


~ Good morning, I...


Las palabras quedaron en el aire.
Isshin Kurosaki recién llegaba de una pesada jornada de trabajo en el hospital. No había estado en casa por dos días y ahora que regresaba, sus hijos lo sorprendían con esta escena.


~ Pa, papá, nosotros... yo...

~ Es bueno tenerte aquí, Rukia-chan.

~ Ha-Hai !.


El silencio los envolvió por un rato. Al final, la chica dejó a los hombres solos, alegando que debía arreglarse antes de ir a la escuela, aunque lo único que había en su habitación era su cama.

Ambos Kurosaki se miraban fijamente, Ichigo con su característico ceño, Isshin con una picara sonrisa adornándole la cara.


~ Sé que vas a decir una locura, así que hazlo ya.


Decía el pelinaranja al tiempo en que desviaba la mirada y se rascaba la cabeza, fingiendo indiferencia.


~ Ya te habías tardado, Ichigo.


El muchacho volvió a mirar a su padre, ahora si sorprendido ante aquellas palabras.


“¿A caso él?.”


El doctor pasó junto a su hijo y se concentró en servirse un café bien cargado. . . lo necesitaba, estaba muy cansado.


~ ¿D-de qué hablas, viejo?.


Una gran sonrisa cruzó el rostro de Isshin ante la pregunta de su hijo.

¿Qué no era obvio?, él era su padre después de todo y aunque no actuaba de forma muy cuerda a veces. . . la mayoría de las veces, nadie conocía a Ichigo mejor que él. Cada gesto, cada palabra y el inútil y empecinado intento del pelinaranja por evitar lo inevitable. . . enamorarse de Rukia Kuchiki.


Desde el primer encuentro, aun a pesar del claro rechazo de Ichigo, el Kurosaki pudo ver en su mirada la emoción ante la llegada de esa nueva personita.

Luego, el fuerte deseo de protegerla a pesar de su corta y tierna edad, para finalmente ver a un hombre desesperado por dejar de pensar en la chiquilla como un hombre piensa en una mujer, al extremo de alejarla cruelmente de él, tratándola de la forma más fría y grosera.

¿Y todo para qué?. . . para al final de cuentas caer rendido a los pies de la pequeña y linda chica. . . la que debió querer como a una hermana.


~ Rukia regresó a casa... me disculpé con ella y...

~ ¡ La amas !.


Aquello no era una pregunta, era una afirmación. Al pelinaranja ya no le sorprendían las palabras de su padre.


~ Si.


La sonrisa de Isshin Kurosaki se amplió aun más al escuchar a su hijo, por fin había dejado a un lado su obstinación y aceptaba abiertamente y sin temor alguno sus sentimientos por la Kuchiki.


~ Ya lo sabía... y está bien. No hay mejor mujer para ti que ella, y no hay mejor hombre para ella... que tú.


Una pequeña sonrisa se formó en los labios de Ichigo. Era bueno saber que su padre los apoyaba en su loco, pero intenso romance.


~ Solo te pido una cosa, hijo.

~ ¿Cuál?...

~ Usen protección cuando duerman juntos, porque aunque me muero por tener nietos, Rukia-chan aun es muy joven.

~ ¡¡ Maldito viejo pervertido !!.


Gritó el muchacho, poco antes de salir de la cocina y gritarle a su novia que se les estaba haciendo tarde.

La sonrisa en el rostro de Isshin no se borró de su rostro en ningún momento, mientras un pensamiento cruzaba su mente. . .


“Si, así es como las cosas deben ser.”






. C o n t i n u a r á .
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Me encanta la personalidad de Isshin y realmente creo que quiere a Rukia como a otra hija.

Y en verdad pienso que a él le gustaría que Rukia e Ichigo terminasen juntos, así que. . . no me pude resistir ^^’.


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