_____________________________Por un futuro sin reglas


De: Priss

Capítulo XII
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Byakuya mantenía los ojos bien abiertos; había escuchado atentamente las palabras de Isshin Kurosaki y ahora meditaba si acaso todo lo que él le dijo era verdad.

Abrió los ojos, fijando su mirar sobre su hermana y el estúpido aquel que la había enamorado. Ahora mismo ellos dos se miraban mutuamente y por la posición que mantenían, al pelilargo le era fácil adivinar que sus manos estaban entrelazadas.


Era la primera vez que el Kuchiki ponía precisa atención a cada detalle del comportamiento de su hermana. Nunca la vio tan sonriente, así como ella nunca lo había desobedecido antes ni había cometido tantas estúpidas locuras y todo por ese imbécil pelinaranja.


El pelinegro dobló las cejas y torció ligeramente la boca. Estaba celoso, por primera vez desde que se convirtió en hermano mayor. Hubiese querido tener el cariño y la confianza de Rukia, pero desde que sus padres murieron, él tomó el liderazgo de todo; la familia, los bienes, la empresa.
Byakuya debía ser responsable, frio y calculador, todo para proteger a la chiquilla que terminó huyendo de él.


Sin darse cuenta, el mayor de los Kuchiki había convertido a su hermana en su prisionera. Y tras meditar todo aquello, Byakuya suspiró hondo; la pregunta que estaba a punto de de abandonar sus labios era decisiva, además de difícil de soltar. . .


~ ¿Esto es lo que en verdad quieres, Rukia?.

~ Nii-sama, yo…

~ ¿Quieres quedarte aquí?.


La chica bajó el rostro. Era tan fácil decir que sí, eso deseaba después de todo y sin embargo. . .


~ Y-yo… lo que yo en realidad quiero es… seguir en la misma escuela y libertad para ver a Ichigo.

Isshin sonrió ante las palabras de su “tercera hija”.
Vaya!, con que la novia de su hijo resultó ser todo lo contrario a este: madura y decidida.


~ Quiero regresar a casa y estar contigo, hermano, pero… también quiero ser libre.

El mayor de los Kuchiki escuchó atentamente a su hermana; sus ojos contraídos por la sorpresa. Así que sus miedos habían sido acertados, convirtió a Rukia en su prisionera, pero Byakuya lo único que quiso fue proteger a su hermana.

El pelinegro cerró los ojos, aislándose de todo y de todos a su alrededor. Estaba más que arrepentido, pero no por ello iba a aceptar ese hecho frente a los demás.


Por si fuera poco estaba el tipo de cabellos naranjas.


“No lo aceptaré como el novio de Rukia… jamás!!.”

El hombre entonces abrió los ojos, clavando estos sobre Ichigo. Por donde lo mirase él era un don nadie que no merecía a una Kuchiki, mucho menos a Rukia.
Ichigo sostuvo fijo su mirar sobre su cuñado. Podría decirse que el desprecio era mutuo.

Afortunadamente al Kurosaki poco o nada le importaban las demás personas, en especial su “querido” cuñadito.


Byakuya desvió la mirada; no diría nada ahora, ya se encargaría de hacerle entender a su hermana que ese muchacho no es el indicado para ella.



~ Esta bien, acepto tu petición, Rukia… ahora vámonos. Con su permiso, Kurosaki-san.

El Kuchiki inclinó la cabeza ligeramente, ansioso por irse. Más la menor, con una gran sonrisa en su rostro, corrió escaleras arriba, gritando que iría por unas cuentas cosas; Ichigo la siguió.


Ya en la habitación del pelinaranja, Rukia empacaba ante la disgustada mirada de su novio.


~ No quiero que te vayas!.

~ Ichigo, él… es mi hermano.

~ ¡¡Y tu eres mi novia!!.


La voz del Kurosaki sonó fuerte, disculpándose por ello poco después, pues la sorprendida expresión de la chica parecía culparlo, aunque no fuese así.


“Será muy difícil dormir sin ti entre mis brazos, Rukia.”

Pensaba el muchacho. Quería decirle esas palabras a la Kuchiki, pero su orgullo pudo más.
Como sea, Ichigo se congeló al sentir como la chica lo abrazaba, recargando la cabeza sobre su pecho al tiempo en que cruzaba sus pequeñas manos sobre su ancha espalda.


~ Igual extrañaré dormir contigo.

El pelinaranja sonrió; se estaba comportando como un idiota. Después de todo, vería a Rukia todos los días en la escuela. . . Nada había cambiado.
Entonces. . . ¿por qué estaba deprimido?.






. Continuará .
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Como que las cosas se arreglaron muy fácil, no?.

Bueno, aunque en verdad es muy común que las parejas jóvenes se escapen, no quise armar una situación de mayor responsabilidad para esta pareja.

Aunque eso es muy común en mis fics ¬¬’ .


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