_____________________________Por un futuro sin reglas


De: Priss

Capítulo IV
___________________________




Los exámenes ya habían terminado, así que Ichigo al fin podía ser libre, deshacerse de la tortuosa e insoportable presencia de Rukia Kuchiki. ¿Verdad?. . . ¿verdad?.
Entonces. . . ¿por qué la chica estaba allí, recostada sobre el piso de su habitación, leyendo un libro?.


El pelinaranja yacía recostado sobre su cama, mirando el interesante techo. Por su expresión, él parecía estar fastidiado, pero en realidad estaba nervioso; ni siquiera se atrevía a moverse y eso era lo que lo molestaba.


“¿Cuándo fue que comencé a sentirme así con ella?.”

Se preguntaba el muchacho, siempre con ese ceño fruncido, delatando su fastidio.
Ichigo cerró los ojos, esto era desesperante.

Una chica en su habitación, leyendo sabrá dios que cosa. Que se vaya a un maldita biblioteca, para eso son, o mejor aún. . .


~ ¿Por qué no te vas a tu casa?.

La voz del Kurosaki sonó llena de fastidio, aburrida, quizás. Más poco después apretó los dientes; no se suponía que dijese eso, él solo estaba pensando, es decir. . . por supuesto que se sentiría mucho más relajado, con Rukia a no menos de un metro de él, pero. . . él no quiso decirle eso, al menos no de esa manera. El muchacho solo estaba pensando tonterías, como siempre, solo eso.


~ ¿Te molesta que yo esté aquí?.

Con la mirada aun fija en el techo, Ichigo dobló una ceja al escuchar a su compañera. Para colmo, la voz de la chica sonó seria, clara señal de que no iban a reñir por esto.
El chico maldecía su mala suerte; era mucho mejor pelear por tonterías, lo cual era muy seguido, a lastimarse y tragarse el coraje.


~ Sabes que no.

~ Entonces me quedo.


El pelinaranja no pudo más que sonreír. Esa situación suya. . . era estúpida, pero le gustaba, eso él bien lo sabía.


“Pero nunca se lo diré.”

Pensaba él; una expresión más tranquila adornándole el rostro.

Si, jamás le diría a Rukia que le gustaba su compañía. ¿Por qué?, simple, porque no quería malas interpretaciones. Ella era su amiga, si, una chica a la que a él le encanta hacer rabiar, una de las pocas mujeres con las que puedes pasar un rato divertido sin que haya nada más.


“Eso es todo… ¿verdad?.”

Ichigo volvió a doblar la boca tras este pensamiento. Definitivamente es mejor no pensar y por supuesto, no hablar jamás de esto con Rukia.


~ Yo… simplemente no tolero estar en casa.

Al escuchar, después de un rato, la voz de la joven de cabellos negros, Ichigo se dio cuenta que su amiga no tenía ningún problema en tratar ciertas cosas con él.

~ Es demasiado estresante ser vigilada por mi hermano, además… siempre estoy sola y la casa es demasiado grande… no me gusta el silencio.

~ Y por eso te vienes aquí y me arruinas la vida.

~ Dijiste que no te molestaba.


El pelinaranja sonrió. La voz de Rukia sonaba a pelea. Le encantaba hacerla enojar, ¿para qué negárselo a sí mismo?. Además no le gustó escucharla hablar de sus problemas, de su soledad.


~ Tonta!.

El sonrió, estirando los brazos a los costados de la cama. ¡Grave error!, pues la chica tenia apoyada su mano en el borde de la cama, sus manos se rozaron y fue atroz sentir el escalofrío que esto les provocó.

Rukia se sonrojó, y como reflejo quiso retirar su mano, pero no pudo, pues Ichigo atrapó ésta entre la suya, grande y áspera. Él no supo por que hizo tal cosa, solo lo hizo. . . pero definitivamente se sentía muy bien.


La Kuchiki no pudo evitar el sonreír al sentir como el pelinaranja apretaba un poco más su mano, tampoco pudo desacelerar su alocado corazón.


“Seguro que hasta él puede escuchar los latidos.”

Pensaba la mujer, relajándose, sin darse cuenta, con el solo toque de ese hombre.
Cerró los ojos, una sutil sonrisa adornándole el rostro. Estaba tan tranquila y se sentía tan bien, que se estaba quedando dormida, mientras a los lejos, escuchaba al chico que le sostenía la mano.


~ Estoy aquí, ¿qué no me ves?… no estás sola.






. Continuará .
________________________________________________
Siento que este cap es como de relleno, pero la verdad es aquí donde estos son se empiezan a llevar bien.

Vamos, en esta historia, ellos no empezaron muy bien que digamos ¬¬’.


priss_pk@hotmail.com