_____________________________Por un futuro sin reglas


De: Priss

Capítulo III
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Rukia entró a la habitación del muchacho; una sonrisa le adornaba el rostro.
Conocer a la familia de Ichigo era. . . ¿cómo decirlo?. Una experiencia verdaderamente relajante, en especial el padre. Ese hombre era en verdad peculiar, además, ser testigo del extraño “amor” que le profesaba a su hijo era algo que no tenía precio.


En especial para ella, quien siempre había estado atada a las rígidas reglas de los Kuchiki. Ella no era capaz ni siquiera de opinar, mucho menos de quejarse y ni se siga de oponerse.
Y ser testigo de la convivencia tan normal, por decirlo de alguna manera, de los Kurosaki, fue. . . tan nuevo para ella.


~ Anda, vamos, búrlate.

Ah, pero Ichigo no estaba disfrutando de esto para nada.
Se sentía como el payaso que debía divertir a la “señorita perfección”.


~ Tu habitación es muy pequeña.

El pelinaranja apretó los dientes al escuchar a la chica.
¡Esa desgraciada!. Él se había referido a las desagradables presentaciones, no a su casa y mucho menos a su recamara.


~ Duermes en una cama?!!.

Rukia se sentó sobre el lecho, dejando caer su espalda sobre el colchón poco después.


~ Oe, ¿qué haces?. Vamos a estudiar o no?.

~ Yo… jamás había visto un lugar así.


La ceja izquierda del muchacho de pronto volvió a sufrir un tic al él verse ignorado por esa chiquilla. No solo eso, sentía que ella se estaba burlando de él, de su casa y de su familia.
Hasta que la escuchó. . .


~ ¡Qué envidia me das!.

~ Qué?!.


La mujer cerró los ojos.

Su hermano es muy estricto y esta era la primera vez que ella visitaba la casa de otra persona.
Ella había sido criada en un ambiente totalmente japonés, por eso, tener contacto con cosas de origen occidental, pues. . . era una sensación de emoción tan nueva.


Ichigo permaneció de pie y en silencio. Verla ahí, sobre su cama, con los ojos cerrados y esa sonrisita tan sincera, era desesperante para él, más que nada porque el Kurosaki fue presa de una sensación extraña que ni siquiera intentó explicar, pues tenía miedo a encontrar una respuesta.
El hecho es que un cosquilleo surgió en su estomago y le provocó un fugaz escalofrío. . . Y la culpable era esa chiquilla. . .


~ Si, como sea. ¿No se supone que debemos estudiar?, pues empecemos.

~ Si.


El chico estuvo a punto de exigirle a Rukia que se bajase de su cama y se sentase en el piso, pero la pequeña respuesta de la mujer fue un suspiro que lo distrajo o mejor dicho lo desarmó.
Como sea, el Kurosaki terminó enfadado consigo mismo y se tumbó en el piso, alcanzando sus libros, decidido a estudiar, pues esa definitivamente era mejor opción que seguir consciente de la sonrisa de Rukia.
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~ Y es por eso que Pinker dice que el lenguaje es una capacidad innata de los humanos. . . un instinto.

Rukia cerró su libro, fastidiada de leer.


~ Pues para mí que el tipo está loco.

~ Tienes razón.


La chica no pudo evitar reír sutilmente ante el comentario tan fresco del pelinaranja.
Si su hermano la escuchase decir algo como eso, pues. . . sabrá dios que pasaría. Pero habría una reprimenda, eso seguro.


Las miradas de los jóvenes se cruzaron por unos instantes, compartiendo una sonrisa. No era nada fácil que estuviesen de acuerdo en algo.
Un leve carmín adornó el rostro de la Kuchiki, quien consciente de esto, desvió la mirada, encontrándose con su reloj.


~ No puede ser!!.…
Decía agitada, guardando sus libros.
~ Es tarde, mi hermano me matará.


Rukia se despidió, dispuesta a correr hasta destrozar sus piernas con tal de evitar que Byakuya se enojase con ella, pero la voz del Kurosaki la hizo detenerse justo cuando sujetó la perilla de la puerta.


~ Oe, Rukia… etto… vendrás mañana, ¿verdad?.

~ Nani?.


Ichigo desvió la mirada y comenzó a rascarse la cabeza, disimulando su interés.


~ Bueno, hay exámenes dentro de poco y no me haría mal repasar un poco más.

La chica lo miraba casi incrédula. Quería descifrar esas palabras, pero no tenía tiempo, así que solo sonrió para luego desaparecer de la vista del pelinaranja.

E Ichigo se preguntaba: ¿por qué demonios había dicho semejante idiotez?.






. Continuará .
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En verdad creo que a Rukia le causa curiosidad la sencillez de la vida de Ichigo, que por cierto es muy occidental, no?.

Por cierto, lo que mencione sobre Pinker. . . es una teoría real.


priss_pk@hotmail.com